Reseña

SEMBRANDO VALORES PARA UNA COSECHA DE EXCELENCIA

Con este propósito nació nuestro Colegio en la década de los 80. Nació primero en el corazón y la mente de un grupo de personas de la Iglesia Presbiteriana de Quilpué, que tenían el deseo  de ver a niños y jóvenes recibiendo educación integral, con valores cristianos universales que les permitiesen acceder a la educación superior y a vivir una vida plena.

Nuestros comienzos fueron pequeños, en 1983 se abrieron las inscripciones en una pieza prefabricada ubicada en calle Esmeralda, para ingresar al colegio que aún no tenía nombre. Por lo significativo se eligió el nombre ‘Esperanza’, pues representaba gran parte de la visión y misión de nuestro colegio.  El proceso de formación del colegio fue largo y exigente, con mucha demanda de documentos y fondos que eran necesarios para darle vida a este gran proyecto.

Muchas personas y entidades se hicieron parte de este proceso: la compra del terreno, la construcción de las distintas etapas y el inicio de las actividades escolares.  Cada uno aportó su granito de arena para que el colegio fuera tomando forma.  Muchos de los colaboradores y  profesores trabajaron sin remuneración durante el primer período, donando su tiempo, su trabajo y su empeño para que este proyecto se hiciera realidad.

En marzo de 1984 finalmente se dio inicio al año escolar con aproximadamente 75 alumnos hasta 5° básico, recibiendo ese mismo año la Subvención Escolar que a partir del año 1985 ayudaría a financiar la nueva infraestructura, el mobiliario y todo lo necesario para el funcionamiento del Establecimiento.

La Enseñanza Media se inició en el año 1988 y en el año 1991 egresó el primer cuarto año medio del colegio. Más tarde, el año 2001, comenzó a funcionar la Jornada Escolar Completa de 3° básico a 4° año de Enseñanza Media.

En todos estos años, hemos crecido como colegio, hoy existen 31 cursos de pre-kinder a 4° de Enseñanza Media, con aproximadamente 1085 alumnos y alumnas que con compromiso y entusiasmo, aspiran ingresar a la Educación Superior para luego contribuir de manera activa en el desarrollo de la sociedad.

Hoy tenemos gratitud a Dios primeramente, por su inmensa misericordia y por las fuerzas que ha brindado a cada una de las personas que trabajamos día a día para cumplir la misión de este hermoso Proyecto Educativo, por todo lo que Él ha hecho en y a través de nosotros, y también tenemos una inmensa gratitud hacia todas las personas que de diferentes formas han apoyado, se han comprometido y que son parte activa de esta comunidad; en forma muy especial, agradecemos y reconocemos el compromiso de los integrantes de la Corporación que han hecho posible que este Proyecto siga adelante y haya alcanzado las metas hasta el día de hoy. ¡Dios bendiga nuestro Colegio Esperanza!